Decisiones libres para un mejor planeta.
By Juventud de La Tierra
Por: Pablo Restrepo
Es bien difícil estar vivo en esta época y más cuando uno tiene las ganas de transformar el mundo en donde nació. En donde los problemas globales demandan soluciones globales, en donde todo es tan supremamente complejo e interconectado. Donde las ideas del siglo 20 no son suficientes para el siglo 21. En donde las instituciones democráticas locales se quedan cortas a los retos que enfrentamos, como el cambio climático, las redes sociales, la inteligencia artificial, la guerra en contra de las drogas. En donde la sociedad ha perdido la noción del sentido común, la dialéctica y la buena fe, en donde todo se pintó como un dilema entre tribus epistemológicas y es preferible ser de un bando u otro a llegar a un norte común que prime la supervivencia de nuestra civilización liberal, democrática e interconectada. Nuestra generación esta en una busqueda insaciable por la libertad, Sin embargo muchos creen que la libertad es un fin y no el resultado de un proceso complejo que va más allá de simples decisiones libres. En 1958, Isaiah Berlin escribío el libro los dos conceptos de la libertad en donde exploraba la libertad negativa y la libertad positiva, una que es 'libre de' y otra que es 'libre para'. La libertad negativa es no estar restringido por la sociedad para hacer lo que uno le place, libertad de palabra, libertad de asamblea, libertad para crear empresa etc. Apesar de su importancia, Actos libres pueden llevar a nuevas carceles. La Libertad positiva, es la autonomía, la ley que uno se impone a uno mismo, libertad como el vegetarianismo o la sobriedad en donde uno entiende sus impulsos y busca gobernarlos. En donde se hacen sacrificios a corto plazo para mayores ganancias al largo, en donde se prima un sentido o valor mas profundo que el capricho inmediato. Nuestra sociedad se ha enfocado mucho en la primera y no lo suficiente en la segunda, pues nuestra crisis ambiental demanda esta intencionalidad de propósito y acción en el mundo, La busqueda de la soberanía del ser demanda la integración del Pensamiento el sentimiento y la voluntad.
Un cambio profundo de nuestra realidad contemporánea demanda la alineación de la inteligencia, el corazón y la voluntad de cada uno de nosotros para lograrlo, esto como lo explica Daniel Shumachenberger es la soberanía humana. El ser realmente libres para poder crear una realidad nueva, demanda que seamos ser-es humanos completos (*Tomado de los Yippies concepto de Jerry Rubin Ser-es Humanos). Podemos definir la soberanía de manera más formal como el producto de la sensibilidad, la inteligencia y la agencia o como pensar, sentir y actuar. (*En el budismo es comun hacer una oracion en donde se postran las manos en la cabeza, el corazón, y las entrañas, en recordacion de las tres joyas esto rima muy bien con la idea de mente, corazon y tripa i.e Buda, Dharma, Sangha).
La inteligencia se relaciona con la capacidad de procesar datos para poder darle un sentido al mundo, más allá de lo que se percibe a primera vista, demanda pensamiento crítico, pensamiento sistémico, pensamiento lateral, abstracción, discernimiento, resolución de problemas, metodologías de diseño, claridad, procesamiento de datos etc. La verdadera inteligencia demanda la empatia para escuchar la subjetividad del otro y llegar a la profundidad de lo que dice.
La sensibilidad se relaciona con la capacidad de uno para sentir el mundo, la llamada inteligencia emocional (incluida la percepción interna de uno mismo y la empatía). Incluye cualidades como conciencia, atención plena, profundidad de sentimiento, cuidado, sensibilidad y el amor y la compasion. Representa estar conectado con los sentidos y tener la capacidad de percibir el ambiente en donde uno se encuentra presente y adaptarse a ese entorno.
La agencia se relaciona con la capacidad de uno para actuar en el mundo. Incluye atributos como voluntad, impulso, responsabilidad, determinación, disciplina, resiliencia, control de impulsos y valentía. Es la manifestacion del mundo interno al mundo externo representado en la creacion de comunidades intencionales, de metodologias y teorias de cambio, de emprendimiento, ejecucion de planes y creación artistica
Muchos de nosotros que nos consideramos activistas, yo incluido, tenemos mucho corazón, en muchos casos, mucha mente, pero son muy pocos los que tenemos realmente voluntad. Tristemente la agencia o voluntad es parte de un sistema adaptativo que como los otros es desarrollado al ser premiado por una serie de incentivos los cuales en nuestra sociedad se ven reflejados en el dinero. Es frecuente que quienes tienen mucha mente, se bypasean el corazón y desarrollan su voluntad para ser premiados con símbolos de estatus y poder adquisitivo. Es igualmente frecuente que quienes tienen mucho corazón se sienten frustrados al no desarrollar su capacidad de agencia. Es igualmente frecuente encontrar a personas inteligentes que sesgan su capacidad de hacer sentido en el mundo por compromisos económicos, relaciones de comunidad o tribu o por simple falta de claridad ante la complejidad de la información.
Para mi esto habla de que nuestro sistema no logra sacar lo mejor de los ser-es humanos pues al final estamos desalineados. El sistema termina corrompiendo a personas quienes serían éticas pero que por la realidad sistémica terminan comprometiendo sus valores o capacidad de hacer sentido ante el mundo. Como activistas y personas que buscamos hacer una transformación debemos ser coscientes de esta vision de la libertad asi crear con nustra pensamiento, palabra, sentimiento y obra un mejor mañana.
Pensar, sentir, actuar es asi de simple. Inteligencia, corazon, voluntad.